Manipura es el nombre en sánscrito del tercer chakra.”Maṇi” significa “joya” o “gema” y “pura” “ciudad”.
En el cuerpo físico, el chakra Manipura está situado en el área del ombligo y el plexo solar (plexo celíaco, zona del epigastrio).
En los antiguos textos de yoga se asocia al elemento fuego.
Vibración global: 528 Hz.
Tradicionalmente este chakra se representa con un loto de diez pétalos de con un triángulo rojo representando el tattva del fuego. La letra en sánscrito del centro es ram. En cada uno de ellos está escrita una letra sánscrita, que representan las vibraciones de sonido individual de los nadis asociados.
El bija mantra de Manipura es RAM, sonido que representa al elemento fuego.
El sentido es la VISTA (sé en qué dirección se dirigen mis acciones).
La piedra es el ámbar.
CUERPO FÍSICO: su área de irradiación son órganos digestivos (hígado, páncreas, estómago…), suprarrenales, plexos nerviosos de la zona, diafragma, parte de la musculatura intercostal.
CUALIDADES: Manipura es el centro del poder personal, del compromiso y la perseverancia (me comprometo con la acción aunque me falte motivación o fuerzas porque sé que es bueno para mí, por autoestima y confianza en mí, no por exigencia, siendo una “tirana” conmigo). También es el centro de la manifestación de la luz y la intensidad. Núcleo del empoderamiento, autoestima, identidad, juicio, capacidad de centramiento y de dar dirección a nuestra energía, tener una intención. Se asocia con la capacidad de gestionar = “digerir” las experiencias que la vida nos trae, capacidad de decisión y liderazgo. Aquí es donde se desarrolla la fuerza para el equilibrio interno, la inspiración y la buena salud.
SOMBRA: Lo que bloquea a mi tercer chakra es el enojo excesivo, la avaricia, los celos, la desesperación. La inacción (bloqueo) por cualquier motivo, como conformarse por ser aceptado por los demás, no querer ver tus verdaderos deseos y emociones, no confiar en ti, no verte capaz (falta de autoestima), falta de fuerza o espontaneidad…También se ensombrece por problemas físicos como problemas de digestión y de los órganos relacionados.
Para equilibrar nuestro tercer chakra con ejercicios físicos podemos realizar asanas que estiren nuestro abdomen como el arco (dhanurasana) y el pez (matsyasana), asanas de fuerza en las que se entrene nuestra musculatura abdominal como tabla (kumbhakasana), el barco (navasana), el bastón (dandasana), también torsiones y estiramientos laterales para movilizar costados y diafragma, flexiones como la pinza (paschimottanasana), ejercicios dinámicos que activen nuestro fuego, como los saludos al sol, y pranayamas, como la respiración costodiafragmática y la respiración de fuego (Kapalabhati).
Espero que te haya sido de utilidad.
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Gracias por leerme.